El Ministerio de Igualdad contabiliza 47 asesinatos machistas en lo que va de año, tras haber confirmado el homicidio por violencia de género de tres mujeres en Murcia, Alicante y Castellón en los últimos días. Son dos menos que en todo 2022. En lo que llevamos de septiembre las víctimas se elevan a siete, por lo que ya se ha alcanzado la cifra registrada el pasado agosto. Ante estos datos, se convocará un nuevo comité de crisis cuando termine este mes. Así lo ha confirmado este lunes la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell. “No son buenas cifras, son lamentables”, ha afirmado.
La cifra de 47 supone 16 asesinatos más que en las mismas fechas del año pasado. “Después de tener una tendencia a la baja en los tres primeros años de Gobierno, este año se ha incrementado la concentración de feminicidios en el verano”, ha explicado la delegada contra la Violencia de Género. Sin embargo, ha destacado que estos datos no constituyen la peor cifra de la serie histórica. 58 mujeres perdieron la vida en 2007 y en 2006 se registraron 55 asesinatos por violencia de género. Desde que arrancó la estadística oficial, en 2003, los crímenes de mujeres a manos de sus parejas o exparejas se elevan a 1.231. Rosell ha cargado contra los alegatos “muy peligrosos” contra las mujeres y “a favor de la violencia de género, como son los discursos negacionistas”. “A las mujeres es difícil transmitirles seguridad si un sector minoritario dice que la violencia de género no existe. Quienes abonan el silencio son los mayores cómplices”, ha dicho.
Rosell también ha informado de que en el primer semestre del año se han registrado 13 feminicidios, asesinatos de mujeres cometidos fuera del ámbito de la pareja o de la expareja. Suponen un 40% menos respecto al mismo periodo de 2022, cuando se cometieron 22 crímenes. Esta estadística, que se publicó por primera vez el año pasado, contabiliza cuatro tipos de asesinatos fuera de la pareja: familiar, sexual, social y vicario (para causar daño a la mujer). De estos 13 feminicidios, que han dejado a un menor huérfano, ocho han sido cometidos por familiares (61,5%), tres se han contabilizado como feminicidios sexuales y han afectado a mujeres que ejercían la prostitución, y los dos casos restantes se han considerado sociales debido a que los asesinos fueron un compañero de piso y el hijo de una amiga de la víctima. España se convirtió el año pasado en el primer país europeo en contabilizar estos homicidios.
Los 13 agresores pertenecían al entorno de las víctimas, algo ya observado en 2022. “Este dato demuestra que los feminicidios no son cometidos por desconocidos que persiguen a sus víctimas, sino que el lugar de mayor riesgo para las mujeres es su domicilio”, ha advertido Rosell, quien ha añadido que la mayoría de estas mujeres habían cargado con el peso de las tareas de cuidado.
La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género ha destacado que solo una de las 13 víctimas había interpuesto una denuncia, y que solo en un caso el agresor intentó suicidarse. Este dato es relevante porque en los crímenes cometidos por parejas o exparejas un 62% de los asesinos quiso quitarse la vida tras los hechos. El 61% de las víctimas superaba la cincuentena.
Rosell ha resaltado que han aumentado las vías de ayuda a las víctimas de violencia machista a través del 016. Cada mes del verano la línea ha superado las 10.000 consultas. El 85,4% han estado relacionadas con violencia de género. Los mecanismos de control telemático para la protección de las mujeres también han ascendido. Hay 4.000 activos, 1.000 más que en 2022. “Ninguna mujer ha sido asesinada portando el dispositivo”, ha enfatizado Rosell, quien, además, ha celebrado que cada vez se denuncien más violencias como los besos sin consentimiento, aunque sin citarlo expresamente, en referencia al beso que el expresidente de la Federación Española de Fútbol Luis Rubiales dio a la jugadora Jennifer Hermoso después de que la selección femenina de fútbol se alzara con el título de campeonas del mundo.
A lo largo de 2023, también se ha ampliado el servicio ATENPRO (Servicio Telefónico de Atención y Protección a las víctimas de la violencia de género) a todas las víctimas de cualquier tipo de violencia y se han inaugurado los centros de crisis 24 horas en todas las provincias y comunidades autónomas para las víctimas de violencias sexuales, medidas incluidas en la Ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual.
El teléfono 016 atiende a las víctimas de violencia machista, a sus familias y a su entorno las 24 horas del día, todos los días del año, en 53 idiomas diferentes. El número no queda registrado en la factura telefónica, pero hay que borrar la llamada del dispositivo. También se puede contactar a través del correo electrónico 016-online@igualdad.gob.es y por WhatsApp en el número 600 000 016. Los menores pueden dirigirse al teléfono de la Fundación ANAR 900 20 20 10. Si es una situación de emergencia, se puede llamar al 112 o a los teléfonos de la Policía Nacional (091) y de la Guardia Civil (062). Y en caso de no poder llamar, se puede recurrir a la aplicación ALERTCOPS, desde la que se envía una señal de alerta a la Policía con geolocalización.